¿Puede una nueva distribución cambiar el aspecto de una casa hasta parecer otra? El objetivo en esta vivienda era recuperar la luz perdida. Un cambio de 360 grados que supuso el renacer de esta vivienda gracias a una redistribución del espacio que se extendió por toda la casa focalizando especialmente en dos estancias: el exclusivo vestidor amplio, funcional y elegante creado ad-hoc y una singular cocina con dos entradas, pensada para ser el corazón del hogar, pero también un espacio de trabajo y tránsito hacia otros lugares íntimamente relacionados como el salón-comedor. Un mobiliario y carpintería a medida para los baños y el especial hincapié en la luz, estudiada para ser la protagonista a través de colores y luminarias, dieron los últimos pero inconfundibles rasgos a esta vivienda llena de personalidad.